La Columna de Santiago A. Verga – Capítulo 2

¿ESTÁS SEGURO QUE FALTA EL AGUA? (2DA. PARTE)

 

Vamos a continuar con la 2da parte  de esta columna que pretende ser algo sencillo con el objeto de cuestionar y cuestionarnos los problemas más serios; es decir, las razones más valederas, según el criterio personal, avalado en parte por algunas posturas del Ing. Santiago Reyna, quien es un erudito en la materia y su razonamiento, nos parece el más certero, porque es concreto y no tiene verso. Tiene Datos!

En principio podemos decir sin temor a equivocarnos que si somos más,  necesitaríamos disponer de mayor cantidad de agua. Sencillo, no? Es decir, no hablamos de que tiene que llover más, sino que esto demuestra una falta total de consideración de los sucesivos gobiernos provinciales en haber estudiado el tema y haberlo resuelto, pensando en el aumento demográfico. Elemental!!

Una de las reflexiones que hacemos es que si se está transportando agua desde otros lugares para traérnosla hasta Sierras Chicas, el problema sigue siendo el mismo, no es la falta de agua, sino la falta de haber contado con las obras necesarias para trasladar el agua, y que en vez de usar camiones, se usen obras de canales o acueductos, que es lo mejor.

Si tenemos en cuenta estas dos cosas necesarias, es decir, el crecimiento y los acueductos, por qué no se fueron haciendo regularmente cada determinada cantidad años en vez de esperar a llegar a este estado?. Pero no!. Pareciera ser que los argentinos y los de Córdoba somos muy particulares, tenemos el espíritu de lo que llamo: espíritu del bombero. O sea, esperar que se cause el incendio para apagarlo luego, lo que nos lleva a que cuando llegamos, ya la mitad está quemada, y la otra semidestruida.

Fijémonos, como se buscan excusas o se informa raro. Hemos leído en el periódico más conocido de Córdoba, que el origen y causa grave es por la cantidad de loteos que se han autorizado con fines económicos, etc, etc. Pero, por otro lado tenemos el testimonio del Intendente de Salsipuedes -Marcelo Bustos- la población más afectada probablemente y que ha expresado y se ha hecho público que en esa localidad no se ha aprobado ningún loteo desde el año 1974.

Entre los años 1827 y 1832, años de una gran sequía, coincidió con la visita de Charles Darwin a nuestro país, y éste dejó asentado en su libro de viaje como “La Gran Seca”. Este fenómeno se desarolló durante la Pequeña Edad de Hielo, y que se produjo en la región Pampeana durante los siglos XVIII y XIX (18 y 19), y la aridez era terrible. En realidad era casi un desierto, de tal manera, que ni siquiera crecían los cardos ni alguna otra planta. Dice Darwin en sus asientos que por la cantidad de aves, animales silvestres y más de un millón de cabezas de ganado muertas, expresó que el país tenía el aspecto de un camino carretero de polvo!!

Algunos se estarán preguntando, y ¿habrá sido por el cambio climático?

Claro. Contestemos con firmeza la pregunta. Sí era uno de los tantos cambios climáticos que sufrió nuestro planeta en millones de años. Se supone que se llama cambio climático el que se produce en un período de un siglo.

Es por ello, que ahora se habla del cambio climático con un grado y pico de aumento de la temperatura en los últimos 100 años. ¿Y que fue el período Jurásico? Indudablemente el más caliente de todos.

O sea, El cambio climático no es como se quiere hacer creer por intereses económicos y políticos que se inició en el siglo XX porque los automóviles usan derivados del petróleo, etc. Y un montón de pavadas que se esgrimen. El tema es que seguramente seguirá cambiando, y el hombre no lo puede parar ni modificar, por más que estemos adelantados tecnológicamente.

Todas estas cosas deberían ser de estudio permanente de nuestros gobernantes de turno; por lo tanto volvamos a lo que nos ocupa y es cómo trasladar el agua de un punto donde hay, hacia otro lugar donde escasea.

Ya hace mucho tendríamos que haber tenido el acueducto “Sierras Chicas Norte” que tiene casi 50 kms de longitud, si tomamos el tiempo en que se dijo la obra sería hecha. Pero, podemos decir que ya falta muy poquito; es decir, ya llegó a Salsipuedes, y servirá para proveer de agua a unos 60 mil habitantes.

Muchos se preguntarán ¿ Y… que pasó ahora? Bueno ahora… pasa lo que le pasa siempre al Estado, que por falta de previsión faltan los elementos más que necesarios como son las bombas, los tableros eléctricos, las válvulas electrónicas, etc. O sea, no están y vaya a saber cuándo estarán, porque como todo el mundo sabe, le guste o no le guste, hay trabas en la importación, falta de dólares, etc. Y todas las causas que quieran ponerle. La peor es la producida por el propio Estado. Se llama “Burocracia”.

Otras sociedades muy diferentes a las nuestras, no recurrieron al Estado para progresar y solventar sus necesidades, sobre todo las sociedades del Norte. Por eso, vamos a volver a recordar a Juan Bautista Alberdi, cuando dijo: “LAS SOCIEDADES QUE ESPERAN SU FELICIDAD DE LA MANO DE SUS GOBIERNOS, ESPERAN UNA COSA QUE ES CONTRARIA  A LA NATURALEZA”